viernes, 17 de septiembre de 2010

Nueva Canarias anima a la Ciudadania Canaria a participar en las movilizaciones del Viernes 29.

Nueva Canarias llama a sus militantes y simpatizantes y, en general, a la ciudadanía canaria a criticar y oponerse a las políticas neoliberales que hacen pagar la crisis a quienes no la han causado, especialmente a los sectores más desprotegidos; y les anima a participar en las movilizaciones ciudadanas en defensa de una política de inversión pública frente a la crisis y del mantenimiento del Estado del Bienestar.


El próximo 29 de septiembre se producirán en toda Europa movilizaciones sociales, convocadas por la Confederación Europea de Sindicatos, que tratan de mostrar el rechazo a las políticas neoliberales puestas en práctica por los gobiernos europeos frente a la actual crisis económica. Ante las actuales circunstancias de destrucción de tejido empresarial, crecimiento del desempleo y aumento de la desprotección social, Nueva Canarias ha venido manteniendo una posición coherente en defensa del Estado del Bienestar y de la aplicación de políticas públicas que estimulen la inversión y que den cobertura a las personas que peor lo pasan. Ante decisiones políticas que no abordan consecuentemente la crisis ni aportan salidas que posibiliten la generación de actividad económica y empleo, ni afrontan medidas para la mejora de la protección de la gente más vulnerable, NC desea manifestar su posicionamiento:
1. Las medidas económicas acordadas a nivel europeo el pasado mes de mayo suponen el abandono de las políticas anticíclicas desarrolladas hasta entonces de estímulo fiscal de la demanda, con fomento de la inversión pública para favorecer la actividad económica, combatiendo así el desempleo, al menos hasta que la inversión privada no garantice un despegue autónomo. Esta política es bruscamente sustituida por otra de inspiración claramente conservadora: la prioridad ya no es favorecer la recuperación económica sino la urgente reducción del déficit de los estados, vía recorte severo del gasto público.
2. En la Unión Europea, bajo el pretexto de apaciguar a los “mercados financieros” que atacaban la deuda soberana de algunos países de la zona euro, se ha impuesto una política económica liberal, liderada por el gobierno conservador de Alemania, sin que los escasos gobiernos socialdemócratas hayan sido capaces de elaborar una estrategia propia. Las medidas de ajuste del gasto público de todos los países de Europa a la vez, incluyendo aquellos que como Alemania no lo necesitaban, sacrificará a corto plazo la recuperación, lo que va a suponer grandes costes sociales en los estados con más paro, entre ellos España.
3. Se ha hecho exactamente lo contrario de lo que aconseja el Informe del Grupo de Reflexión sobre el futuro de la UE en 2030, presidido por Felipe González, y que fue presentado el mismo mes de mayo en el que los dirigentes de la Unión aprobaron el giro en sus políticas anti-crisis. “Para salir de la crisis -señala este Informe- necesitamos mantener medidas
anticíclicas, hasta que la economía despegue por sí misma, porque la máxima prioridad sigue siendo crecer y crear empleo. Si aquellas se cortan a destiempo podemos retroceder. Asimismo, los estados que tienen más margen de maniobra han de asumir mayor liderazgo”.
4. Por tanto, consideramos que se engaña a la ciudadanía cuando se señala que la actual es la única política posible, y la prueba es que Obama en Estados Unidos aplica una política bien diferente, anunciando un nuevo plan de relanzamiento fiscal con más inversión en infraestructuras, incentivos a las empresas y aumento de los impuestos a las rentas más altas, algo que en la UE nadie se atreve a defender.

5. España ha seguido fielmente esa línea marcada por los gobiernos conservadores europeos, aunque es cierto que contaba con menor margen de maniobra debido a su alto déficit público. Las medidas adoptadas por el Gobierno de Zapatero en mayo, con una fuerte reducción de la inversión y del gasto público, conllevan un alto coste en términos de desempleo y de bienestar de la ciudadanía, especialmente de los menos favorecidos. Algo que es evidente en el caso de las pensiones, que han sido congeladas unilateralmente, vulnerando el consenso establecido en el Pacto de Toledo. Y que ralentizará la aplicación de la Ley de la Dependencia, afectando asimismo a la prestación del resto de los servicios públicos.
6. Además, el Ejecutivo español ha acometido en solitario la reforma laboral y anunciado la reforma de las pensiones con poca reflexión, y otorgándoles un efecto milagro que nada tiene que ver con la realidad. Ni la reforma laboral va a crear más empleo y solucionar el problema del paro, ni hay tanta urgencia en el debate sobre el futuro de las pensiones, que aparece, fundamentalmente, como una concesión ideológica a la derecha. Más sorprendente resulta aún que la reforma financiera, tan necesaria por haber sido los bancos y sus derivados financieros los causantes de la crisis mundial, se haya saldado en España exclusivamente con un Decreto-ley que privatiza las Cajas de Ahorros, entidades semipúblicas muy vinculadas a sus respectivos territorios, sin que se tome ninguna medida respecto la banca privada. El PP, que ha visto como le robaban su verdadero programa frente a la crisis, se limita a esconder sus propuestas, sin llegar a ningún acuerdo con el gobierno, excepto apoyar la privatización de las Cajas de Ahorros, así como a esperar que la erosión de Zapatero le ayude a llegar a La Moncloa.
7. Canarias, con 317.000 desempleados, una tasa de paro nueve puntos más que la estatal, con miles de empresas cerradas y muchas otras ahogadas por la falta de crédito, así como con un endeudamiento privado superior a la media estatal, tiene ante sí un grave problema para salir de la actual crisis económica. No hay en las Islas a corto plazo actividad económica privada que sustituya el impulso de la inversión pública, que se va a ver aún más debilitada en los presupuestos del año 2011. Las medidas anunciadas por el Gobierno canario para luchar contra la crisis han sido improvisadas, sin ningún rigor y buscando sólo titulares de prensa para dar la impresión de que están haciendo algo. Los reiterados anuncios del presidente Rivero de crear 80.000 nuevos empleos antes de las elecciones de mayo de 2011 son pura demagogia y una frivolidad, cuando la realidad es que cada día se siguen destruyendo empleos netos en Canarias.

8. Desde NC no negamos la necesidad de disminuir el déficit público en estados como el español. La diferencia está en cómo hacerlo. No sólo se reduce el déficit recortando el gasto, también los ingresos del estado pueden “ajustarse. Sobre todo en España donde la presión fiscal se sitúa casi diez puntos por debajo de la media europea. En primer lugar, hay que tomar medidas decididas para emerger la importante bolsa de economía sumergida que en el caso de Canarias alcanza el 29% del PIB, y en España duplica la europea (24% frente al 12%). Según un Informe de los técnicos
del Ministerio de Hacienda reducir en diez puntos esta bolsa supondría una recaudación adicional de más de 38.500 millones de euros en España. En segundo lugar, hay que combatir el fraude fiscal más allá de lo anecdótico. No toda la presión fiscal debe recaer sobre las rentas del trabajo. No es recibo, como señala el citado Informe, que los asalariados y pensionistas canarios declaren anualmente al fisco una media de 4.469 euros más que los profesionales liberales y los pequeños y medianos empresarios. Por último, es necesario también incrementar los impuestos directos para los ingresos del capital, las rentas más altas y los grandes patrimonios, así como imponer una tasa extraordinaria sobre los enormes beneficios que está obteniendo la banca española en estos momentos de crisis.
9. Para la ciudadanía la adopción de estas medidas, que el Gobierno de Zapatero ha sido incapaz de acometer, introduciría criterios de equidad en el reparto de los costes de la crisis. La percepción social dominante es de injusticia en el reparto de los sacrificios y esto genera desafecto hacia las instituciones democráticas, que son vistas como demasiado permeables a los intereses de los grandes bancos y de los sectores económicamente más poderosos. 10. . Porque lo que subleva a la ciudadanía es que los mayores beneficiarios de las ayudas de los gobiernos en los dos últimos años de crisis, especialmente el sector financiero, sean quienes ahora más denuncien los “insostenibles déficit públicos” de los estados y clamen por su urgente reducción. Paradójicamente, los que provocaron la crisis y se han beneficiado de ella son los que marcan la agenda política a los gobiernos democráticos.

Por todo ello, Nueva Canarias llama a sus militantes y simpatizantes y, en general, a la ciudadanía canaria a criticar y oponerse a esas políticas neoliberales que hacen pagar la crisis a quienes no la han causado, especialmente a los sectores más desprotegidos; y les anima a participar en las movilizaciones ciudadanas en defensa de una política de inversión pública frente a la crisis y del mantenimiento del Estado del Bienestar.

Canarias a 16 de septiembre de 2010