Román Rodríguez: "Ni se incrementa la superficie del Archipiélago, ni desaparecen las aguas internacionales, ni supondrá más competencias"
Nueva Canarias (NC) denuncia el “triple engaño” que el presidente del Ejecutivo autonómico y los diputados de ATI-CC en el Congreso están haciendo a los ciudadanos respecto a los logros que supone la Ley de Aguas Canarias que se aprobó ayer en las Cortes Generales.
El presidente de la formación nacionalista, Román Rodríguez, es contundente al señalar que “ni uno” de los tres supuestos logros de los que habla Paulino Rivero son verdad porque el texto que se ha aprobado “no tiene ningún efecto jurídico”.
“No es verdad que Canarias incremente su superficie de 7.447 a 50.000 kilómetros cuadrados y que esto vaya a suponer un incremento de los ingresos del Archipiélago mediante la financiación autonómica, ni que desaparezcan los pasillos de aguas internacionales que existen entre las islas”, porque lo dice la misma Disposición Adicional de la Ley: el trazado del contorno perimetral no alterará la delimitación de los espacios marítimos de las Islas Canarias tal y como están establecidos por el ordenamiento jurídico español en virtud del Derecho Internacional vigente.
La tercera mentira es que “no va a suponer un incremento de las competencias canarias sobre ningún ámbito marítimo adicional ni sobre las actuales aguas jurisdiccionales españolas. En este sentido el presidente de NC señala que en el acuerdo firmado entre Zapatero y Rivero respecto a esta Ley estuvieron conformes en que el ejercicio de las competencias estatales o autonómicas sobre las aguas canarias (…) se realizará teniendo en cuenta la distribución material de competencias establecidas constitucional y estatutariamente. “Esto significa que tendría que modificarse el Estatuto de Autonomía de Canarias” y ampliar el ámbito territorial de la comunidad, al menos a las aguas de jurisdicción española.
Dos caminos
De hecho el líder nacionalista advierte que sólo existen dos caminos para que se reconozcan las aguas entre las islas como aguas canarias. El primero es la vía soberanista. Y el segundo seguir los pasos dados en su momento por Portugal respecto a las aguas de Azores y alcanzar un acuerdo del pleno del Congreso de los Diputados que después debe someterse al arbitraje multilateral de los organismos del vigente Convenio Internacional del Mar, que será quien finalmente pueda aprobar o no este cambio.
Sin embargo, “lo que ATI-CC y el PSOE han pactado en el Congreso es lo mismo que nada”. Zapatero “se la ha vuelto a colar” a Paulino Rivero al igual que ha hecho con el Plan Canarias, asegura NC que advierte que por más propaganda que el Ejecutivo canario quiera hacer de este “brindis al sol histórico” se demostrará, como ocurrió con el citado plan que “no hay nada nuevo”.